Si has probado la cajeta de Sayula sabrás que es uno de los sabores más famosos y tradicionales de Jalisco. Una golosina que le da fama al municipio del sur de la Entidad y que permanece en el gusto de muchos tapatíos.La receta de la cajeta no es cosa del otro mundo, de hecho, sus ingredientes son bastante comunes, pero las manos que la elaboran le dan ese toque que vuelve inconfundible su sabor. Se prepara con leche de vaca, azúcar y vainilla, aunque existen versiones donde se le agrega tequila, para darle esa característica mexicana. Desde luego, el proceso de elaboración es completamente artesanal y se envasan en ese tradicional recipiente de madera ovalado que ha permanecido desde hace generaciones atrás y que la vuelven característica, junto a su superficie caramelizada, aunque también existen presentaciones regulares en depósitos de plástico y vidrio. Cada "cajita" es hecha a mano, con madera de pino albellano (una especie de la zona) y en un proceso legal y ecológico.La marca más conocida y tradicional es la Cajeta Lugo, etiqueta naranja, y cuentan que fue en 1880 cuando Francisca González González, suegra del fundador, conoció la receta y comenzó a prepararla, cuando laboraba como empleada doméstica en casa de una familia de descendientes de españoles, que comían el dulce.Lo más reconfortante es que no tienes que ir hasta Sayula por la tradicional cajeta, aunque no estaría de sobra recorrer ese bello municipio de la Región Sur de Jalisco, apenas a 97 kilómetros de la ciudad de Guadalajara; y puedes adquirir los productos en establecimientos de dulces típicos, como por ejemplo los que se encuentran ubicados en la cabecera de San Pedro Tlaquepaque, Pueblo Mágico. Con información de SUNOA
