Luego de dos fines de semana en los que la petición de certificado de vacunación contra COVID-19 o prueba PCR negativa es obligatoria en antros, bares, salones de fiesta, casinos y conciertos, el Ayuntamiento de Guadalajara ya comenzará a multar y clausurar.El alcalde de Guadalajara, Pablo Lemus, señaló que aunque la intención de fondo en torno a las medidas tienen que ver con un incentivo para que la gente se vacune y no de medidas recaudatorias o coercitivas, “ya pasó la etapa de apercibimientos. Por las buenas dedicamos varios fines de semana para los protocolos y quien no quiso entender ni modo”.A partir del 14 de enero, en Jalisco se solicitan los documentos para poder ingresar a este tipo de espacios recreativos.Desde entonces, los municipios han clausurado, multado y apercibido a quien no lo cumpla, a excepción de Guadalajara que solamente había apercibido a los comercios, a decir de su presidente, porque “no se trata de estar clausurando negocios, de por sí la situación económica es complicada. 95% de los negocios las cumplen y los que no se les ha apercibido”.Sin embargo, a partir de este fin de semana se comenzarán a aplicar multas y, desde el siguiente, a clausurar.“El Ayuntamiento está para ayudar, por eso dimos este plazo, pero después de tantos días ya deben cumplir con esto”, resaltó.Además, explicó que pese a que no viene señaladas las medidas como tal en la Ley de Ingresos de los municipios, el decreto del gobernador, plasmado en el Periódico Oficial del Estado de Jalisco, los dota de facultades para multar y clausurar.“Son medidas por la situación tan delicada, pero según las previsiones de los propios especialistas, en marzo vamos a tener una situación controlada. Estiman que a partir de la segunda semana de febrero comiencen a bajar los casos”, aseguró.GC
