El gobierno de Andrés Manuel López Obrador quiere académicos que simpaticen con los programas y las visiones de la cuarta transformación y desterrar del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) todo lo que huela a pensamiento neoliberal.Por eso el lunes pasado se consumó la imposición de José Antonio Romero Tellaeche como el nuevo director de este centro de estudios, según lo anunció la titular del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, María Elena Álvarez-Buylla Roces, quien también asegura que ahora los científicos están enfocando sus trabajos al beneficio de los más pobres y no como antes que era sólo un asunto de “fifís” que se gastaban el dinero de las investigaciones en comidas y viajes que ahora investiga, con una diligencia poco acostumbrada, la Fiscalía General de la República.Preocupante que nuevamente asomen los rasgos autoritarios del gobierno de la autollamada cuarta transformación y se pretenda ideologizar una institución educativa que como todo espacio donde se imparte y se genera conocimiento, debe ser abierta y plural como lo han reclamado sus alumnos y profesores inconformes por la imposición de Romero Tellaeche.Con la toma del CIDE el gobierno de la 4T asoma nuevamente su intolerancia a la crítica y a todo lo que huela a contrapesos como ha pasado con los Órganos Constitucionales Autónomos (OCA´s) en especial el Instituto Nacional Electoral y el Instituto Nacional de Transparencia, Información Pública y Protección de Datos Personales, el INEGI, y una muy larga lista de otras organizaciones no alineadas al gobierno lópezobradorista.El intento de cooptación del CIDE ya se veía venir desde que el mes pasado nombraron director interino a Romero y este empezó a hacer destituciones como la de Catherine Andrews, de la secretaría académica, que lo enfrentó con la comunidad académica por considerar esa decisión como arbitraria. Los estudiantes exigieron aquella ocasión su destitución inmediata y que se le separara de los candidatos a ocupar la dirección del CIDE que antier se le dio de forma definitiva. En protesta los estudiantes mantienen un paro en ese centro de estudios.Aunque la mano más visible que ha provocado esta crisis en el CIDE, considerado uno de los centros de investigación social mas prestigiosos de México y América Latina es la titular del Conacyt, quien con total desaseo afirmó sin ser cierto que la ratificación de Romero Tellaeche se dio por unanimidad en el consejo de gobierno, lo cierto es que no podría actuar de esa forma sin tener la instrucción del más alto nivel de la 4T para convertir a esa institución “conservadora” a los tiempos de la 4T.Es, sin duda, otra señal ominosa para la libertad de cátedra y autonomía de los centros de pensamiento que sin duda repercutirá negativamente en la vida democrática del País si los maestros y alumnos del CIDE dejan pasar este nuevo atropello.
